La decisión llega después de que la pasada semana Pari fuera brutalmente golpeado, supuestamente, por policías del Penal de Chonchocoro, donde guarda detención preventiva.
La mujer tiene una condena por narcotráfico en Argentina y su historia se hizo conocida porque su hijo, que padecía cáncer, falleció la semana pasada y le permitieron ir a despedirse.
De acuerdo con Perú 21, las víctimas zarparon a bordo de un bote desde la provincia de Yunguyo con dirección al muelle de Santa Rosa de Guaqui en Bolivia.